Troll
¿Quién no recuerda los muñecos Troll que teníamos de niños? Todos amábamos esos muñecos con el cabello parado, aparentemente algunos todavía los aman.
En vez de afeitarse el mechón de pelo del brazo, o simplemente ignorarlo, esta persona decidió aprovechar la situación y tatuarse uno de sus juguetes de la infancia, el troll. Hay que admitir que el cabello encaja perfectamente en la cabeza del troll dando una imagen genuina.