Envidia: uno de los siete pecados capitales. Podemos apreciar lo que ya tenemos sin dejar de desear más. Algunos de nosotros llevamos nuestros sentimientos en nuestras mangas, mientras que otros los expresamos directamente en sus rostros. Una neblina esmeralda oscurece nuestros ojos como un villano en una película de Disney cuando creemos que nadie está mirando. Los celos son una emoción divertida. No es ‘jaja’ gracioso, pero estas fotos nos sacaron una sonrisa. Echa un vistazo a estas fotos que están bañadas en celos.
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Este joven entiende la importancia de perder una oportunidad. Todos sabemos cómo se siente eso. Esta fotografía muestra todos nuestros rostros, ya sea que estemos a dieta, que tengamos alergias al azúcar o a los lácteos, o que no tengamos tiempo para detenernos a tomar un dulce.
¿Quién no desea poder disfrutar de un cono de helado en un día caluroso? Por favor, no estés triste, pequeña; entendemos. Nosotros también pegamos la nariz al cristal.